En el marco del Encuentro Mundial de las Familias que se está desarrollando en Dublín (WMOF2018) se dio a conocer el Youcat para los niños. Es la tercera edición de este catecismo que hace el Papa Francisco. Sus deseos de llevar a Jesús al alma de cada uno, lo hacen adaptar los modos para que cada cual escuche en su lenguaje. En la Jornada Mundial de los Jóvenes en Brasil, todos los inscritos volvieron con su Youcat bajo el brazo y hoy las familias presentes en Dublín, también podrán volver con el suyo.La alegría de los niños se ve reflejada en las coloridas imágenes del libro; donde la gráfica, los textos, los dibujos, invitan a la lectura y el juego.
El resultado, en una primera y parcial lectura, parece muy bien logrado: el texto tiene un formato muy bello (¡y lleno de colores!), que se presta para la edad de los niños, y presenta de manera sistemática los pilares de la fe cristiana. «Estamos convencidos de que la transmisión de la fe debe darse decisivamente a nivel relacional y esto suceda, antes que nada, dentro de la familia en la intimidad de las conversaciones entre los padres y los hijos», explicó Meuser, uno de los redactores.
«No se queden en silencio cuando los niños hagan una pregunta, conviértanse, ustedes mismos, en trasmisores de la fe. Ayuden a que sus hijos descubran el amor de Jesús, y esto los hará fuertes y valientes en la vida», es la invitación del Papa Francisco a los padres. Y le dice a los pequeños: «Les encomiendo “YOUCAT for kids”, no se cansen nunca de hacer preguntas ni de explicar su fe».
Este martes en Dublín, estuvo el cardenal Schönborn presentando el Youcat para niños. En la oportunidad comentó la experiencia de liderar este gran equipo y agradece el éxito de la versión juvenil, pues es esta experiencia la que les dio el valor para continuar.
Monseñor destacó que estamos viviendo un momento en que la comunicación y hablar en la familia son muy importantes. La cooperación entre padres e hijos es muy importante para la transmisión de la fe. “Youcat para niños es un libro para padres e hijos, para que en la familia puedan hablar juntos sobre la fe”.
Asimismo, en el marco del Encuentro Mundial de las Familias, dos sacerdotes austriacos que colaboraron en la redacción de “YOUCAT”: Michael Scharf y Christoph Weiss (que fue responsable de la oficina pastoral de la diócesis de Viena), realizaron la conferencia “Si los pequeños filósofos hacen grandes preguntas”.
Unos treinta editores están trabajando para su traducción y, a finales del año, el texto será publicado en alrededor de diez lenguas, pero llegarán a ser 72 las traducciones para que se pueda utilizar en las regiones más remotas del planeta. Una empresa universal, “católica” en el verdadero sentido de la palabra. El primero de agosto pasado finalmente se cerró una etapa fundamental con la publicación de la edición alemana de “YOUCAT for Kids”, el nuevo catecismo para niños que, en la versión inglesa, fue presentado oficialmente esta semana en Dublín durante el Encuentro Mundial de las Familias.
Después de “YOUCAT” para jóvenes (que fue publicado hace 7 años con millones de copias en circulación por todo el mundo) ahora sale un texto parecido pero que se dirige a los hermanos más pequeños (de entre 6 y 12 años), pero, sobre todo, a sus padres, con la convicción de que la primera educación a la fe se da en las familias.
Y a los padres se dirige el Papa Francisco en el prefacio: « ¡Queridos hijos, queridos papás!». Bergoglio comienza con una pregunta que un día le hizo un chico canadiense: « ¿Qué hacía Dios antes de crear el mundo?». El Pontífice confiesa que reflexionó un poco antes de responder, para que su interlocutor pudiera entender bien lo que quería decir: «Antes de que Dios creara nada, Él amaba. Y esto es lo que siempre ha hecho: ha amado. Dios ama siempre. Y, cuando creó el mundo, no hizo nada más que manifestar su amor».
«Hojeando las páginas de “YOUCAT for Kids” –continúa el Papa– me topo con preguntas que los niños le hacen a sus padres y a los catequistas millones de veces. Es por esto que considero útil este catecismo, a la par del más grande, en el que se pueden encontrar respuestas a las preguntas fundamentales de la vida: ¿de dónde viene este mundo? ¿Por qué existo? ¿Cómo y por qué vivimos aquí? ¿Qué pasa después de la muerte?».
Pero el Santo padre añade también una expresión llena de significado: «“YOUCAT for kids” es un catecismo muy diferente del que tuve hace tiempo. “YOUCAT for kids” es adecuado para que los niños y los padres pasen tiempo juntos y, de esta manera, descubran cada vez más el amor de Dios». Una calurosa invitación a las familias para que compartan la fe entre las generaciones, tema importante para el Pontífice, un hilo rojo que une diferentes discursos que ha dirigido a adultos y ancianos.
Un texto que cuenta con el beneplácito del Papa no se crea de la noche a la mañana: tuvo una gestación de cuatro años y en ella han trabajado grupos de editores de todo respeto junto con la Conferencia Episcopal de Austria, guiada por el arzobispo de Viena, el cardenal y teólogo Christoph Schönborn, que fue el coordinador del “YOUCAT” anterior y cuya atención por la vida de las familias es bien conocida, como pudo apreciarse en ocasión de los dos Sínodos y cuando fue publicada la exhortación postsinodal “Amoris laetitia”.
Un equipo de teólogos y agentes pastorales de todas las diócesis austriacas estuvieron involucrados en una larga reflexión teológica y pedagógica: algunos textos fueron sometidos también a escuelas y familias católicas, y llegaron respuestas de la pastoral juvenil y catequista.
El catecismo fue preparado con la convicción de que, a pesar de lo que a veces puedan creer algunos, no se necesitan particulares estudios teológicos para hablar sobre la fe, porque cuenta mucho más el testimonio de vida cristiana y, dentro de una familia, el amor entre los cónyuges y el amor entre padres e hijos. En 240 páginas, con preguntas y respuestas, se explican con un lenguaje a medida de niño los elementos fundamentales de la fe católica. No solo palabras, obviamente, sino principalmente ilustraciones, cómics, testimonios de atletas y de santos, información más extendida para los padres y también la presentación y lectura de doce obras de arte de artistas famosos. Habrá a disposición material en un sitio de internet para acompañar la lectura, preparado por la Fundación YOUCAT, esa que en los últimos siete años ha producido una serie de materiales para aderezar la versión de los jóvenes.
«Estamos convencidos de que el lugar crucial de la educación religiosa no es el salón de clases y tampoco la iglesia. Tal vez es un rincón de la habitación de los niños, una hamaca en el mar, la banca de un parque o al pie de la cama por la noche», explican los coautores en el prefacio de la edición alemana, en el que sugieren también a los padres una lectura antes y, si fuera posible, en pareja para comenzar a reflexionar antes de leerlo con sus hijos.
En sólo 4 capítulosHay cuatro capítulos, precedidos por una introducción sobre el mundo y todo lo que existe: El Credo (12 cuestiones sobre Dios), Los Sacramentos (7 encuentros con Dios), Los Mandamientos (10 reglas del juego con Dios), La Oración (Dios siempre tiene tiempo para nosotros). Las preguntas demuestran una profunda experiencia pedagógica y un conocimiento, real y nada teórico, de la vida de las familias: ¿cómo podemos conocer a Dios si no lo vemos? ¿Por qué algunos no creen en Él? Como en el caso de la versión para los jóvenes, se insiste mucho no en el castigo en caso de errores, sino en el abrazo de la infinita comprensión y de la misericordia de Dios.
«¿Qué me va a pasar cuando me muera?»: «Mi cuerpo se deshace, pero mi alma sale a encontrarse con Dios, que me está esperando para abrazarme junto a miles de ángeles y a muchas personas que no se pueden ni imaginar, y comenzará una nueva vida». No faltan preguntas “más adultas”, como: «Pero, ¿por qué las mujeres no pueden ser sacerdotes?». «Porque Jesús llamó a los apóstoles que eran hombres y ellos fueron los primeros sacerdotes de nuestra Iglesia. Pero Él, entre sus amigos, también tenía a muchas mujeres que lo seguían. Las mujeres jugaron un papel muy importante en su vida, empezando por su mamá, María, y María Magdalena. Sin las mujeres toda la Iglesia estaría como paralizada».
Digna de nota es la lectura actualizada e inmediatamente comprensible de los Mandamientos: «Dios sabe cómo moverse, dice cómo está hecho, y nadie es más importante que Él; no hay que pronunciar frases tontas sobre Dios y no hay que desear que nadie se vaya al diablo; respeta a tus padres; ¡no mates a nadie!; si te casas, ¡mantén tu promesa!; ¡nada de descargas ilegales!; ¡no hay que mentir ni ostentar!; no se puede tener todo, ¿entendido?».
Para concluir, el tiempo de la oración y cómo «permanecer en contacto», porque «Dios siempre tiene tiempo». «Dios habla a través de la Biblia, pero más a menudo también a través de palabras de consuelo de la mamá, a través de la naturaleza, de la música y también del silencio: “¡Prepara tu corazón para acoger su Palabra!”». También se proponen diferentes oraciones para el momento de las comidas y para la noche: «Quien reza solamente cuando le dan ganas, es como un amigo que solo se acuerda cuando le va bien o cuando quiere algo de ti».
Se está ya trabajando para llevar a cabo une reflexión en diferentes Iglesias locales: el nuevo Catecismo también involucra a la pastoral Familiar (muchos podrían encontrar confirmaciones y un nuevo impulso para seguir, otros podrían ver un cambio de dirección), pero, sobre todo involucra a la Catequesis, en donde desde años se reflexiona sobre la necesidad de dirigirse, principalmente a los padres porque la fe se transmite en familia y todavía hay demasiadas energías destinadas en las parroquias a los más pequeños, olvidando la formación de los adultos en constante carencia de animadores.