Vía Crucis por África: Sanar las heridas del extremismo religioso
Acompañemos a Jesús, presente en cada uno de nuestros hermanos, para que juntos llevemos su Cruz.
África vive un Vía Crucis permanente. Una realidad brutal. El obispo de Mbaïki de la República Centroafricana, D. Jesús Ruiz Molina nos describe una verdadera pesadilla que es la vida cotidiana de millones de personas. Casi no deja a nadie fuera. Nigeria, Burkina Faso, República Centroafricana y Mozambique son algunos de esos países.
Todos, en su sufrimiento, nos recuerdan la pasión de Jesús. D. Ruiz Molina nos hace una pregunta escalofriante: "¿Hay vida antes de la muerte, en África?"
Los efectos de vivir bajo la constante amenaza terrorista y el miedo son paralizantes. Todo esto provoca un enorme sufrimiento espiritual.
Aquí es donde entra en juego la Fundación Ayuda a la Iglesia que Sufre. Ayudando a curar las heridas, de cuerpo y alma, de las víctimas de
terrorismo religioso. Su colaboración seguramente marcará la diferencia para estas personas martirizadas.
Acompáñanos y reza junto a nosotros el Vía Crucis por los cristianos preseguidos. Este año hemos centrado la oración y la coopeación en este sufrido continente para lavar sus heridas y sentir la mano amorosa de los cristianos que aún estando lejos nos preocupamos por ellos.