Esta semana el Papa Francisco nos llamó a enfrentar este tiempo con esperanza y nos invitó a ser portadores de alegría. “los hombres y las mujeres que rezan saben que la esperanza es más fuerte que el desánimo. Creen que el amor es más poderoso que la muerte, y que seguramente un día triunfará, aunque los tiempos y las formas no lo conocemos”.
En esa línea, los obispos de Costa Rica exhortaron a sus fieles a seguir empeñados a hacer el bien, para poder así contagiar la esperanza, en este tiempo de pandemia.
Dicen en su mensaje, el Papa invitó a los fieles a “otro contagio, que se transmite de corazón a corazón, porque todo corazón humano espera esta Buena Noticia. Es el contagio de la esperanza”.
En el comunicado, los obispos costarricenses subrayan cómo la Iglesia ha tenido que vivir la Cuaresma y los intensos días de la Pasión, la Muerte y la Resurrección del Señor de manera atípica y explican cómo “el contagio de la esperanza pascual nos ha llevado a reconocer las llagas actuales del Resucitado, que son el sufrimiento de la humanidad, especialmente de las personas más pobres, abandonadas y vulnerables. En esta espiritualidad ha encontrado nueva fuerza la esperanza comprometida del pueblo de Dios en nuestro suelo patrio”
“La Iglesia se ha fortalecido como red de consuelo y ayuda” – evidencian – así como se han multiplicado sus obras de caridad.
En la conclusión, los obispos exhortan al Pueblo de Dios en Costa Rica para que siga empeñado en hacer el bien, en auxiliar a las personas más golpeadas por la crisis que estamos viviendo”. “Este testimonio – aseguran – permitirá contagiar la esperanza en nuestros hermanos”.