Hoy queremos recordar y dar gracias por la figura del padre Werenfried que murió el 31 de enero de 2003 a la edad de 90 años. El es el fundador de Ayuda a la Iglesia que Sufre y su testimonio e inspiración nos acompaña todos los días.
Fue conocido como el "Padre Tocino". En 1947 fundó la Asociación Internacional Ayuda a la Iglesia que Sufre, fundación católica de apoyo a los refugiados y a los cristianos perseguidos por su fe. De esta manera, salvó a miles de personas de la miseria moral y material.
Su lema personal fue "El hombre es mucho mejor de lo que pensamos". Para llevar la fe a los más necesitados, tuvo iniciativas muy originales como los "Barcos-Capillas", los "Autos-Capillas" y los "Sacerdotes con mochila"
Eran tiempos difíciles de post guerra de mucha escasez y donde los sacerdotes constantemente temían por sus vidas. El padre Werenfried no dudó y salió a los caminos a solicitar ayuda, medicamentos, comida, ropa
La fundación nació con la inspiración del Papa Pío XII que estaba muy preocupado de los sacerdotes del este que malvivían en los campos de refugiados de centro europa. Pero el padre Werenfried, a poco andar se fue dando cuenta que las necesidades estaban presentes en todo el mundo. Y comenzó un contante itinerar que lo tuvo visitando a los más necesitados en donde estuvieses: América, Asia, Africa, Europa. En todas partes encontraba gente necesitada de Dios.
Pero dejemos que él mismo cuente su historia.