Despojada de su hábito, encadenada, golpeada, insultada... Así, la Hermana Gloria Narváez vivió cuatro años, ocho meses y dos días en Malí, África. "Si te azotan, bendícelos, y que nadie se vaya sin ver tus ojos de misericordia", se decía constantemente. Aferrada a la oración, logró sobrevivir a un secuestro que mantuvo prisionero su cuerpo, pero no su espíritu.
Fue liberada en octubre de 2021 y vino a Chile para contarnos su testimonio. Una historia que comparte con miles de hombres, mujeres y niños que son amenazados y perseguidos por su fe en el mundo.
Si no pudiste escuchar su testimonio, puedes verlo acá: