Irak recibe al Santo Padre
En su primer viaje tras la cuarentena, el Santo Padre estará en Irak entre el 5 y 8 de marzo, dando una señal de esperanza a los cristianos que fueron perseguidos por los yihadistas del Estado Islámico, quienes en 2014 se tomaron gran parte de la Llanura de Nínive.
Por: Fundación Pontificia Ayuda a la Iglesia que Sufre
A los cristianos que vivían a h í , l e s d a b a n d o s opciones: convertirse al islam o morir. Muchos f u e r o n s e c u e s t r a d o s , torturados y asesinados; otros debieron huir y dejar todo atrás para salvar sus vidas. Caravanas de refugiados llegaron al Kurdistán. Fueron años en campamentos y viviendas en precarias condiciones que nadie olvidará. Y hoy quieren regresar a sus casas, aunque desgraciadamente muchos optaron por buscar refugio en países más seguros.
Antes del ISIS, en 2003, los cristianos eran alrededor de 1.500.000 y representaban algo más del 6% de la población, desde entonces el éxodo
ha sido enorme. Aunque no hay cifras oficiales se estima que el número de como 250.000. Una realidad que golpea a otras naciones de Medio Oriente y que podría dejar sin cristianos las tierras donde nació nuestra fe.
El testimonio de estas familias es heroico, ellos son los mártires de nuestro tiempo. Para ellos, nunca fue una opción renegar de su fe. Para los
cristianos de Irak, este viaje demuestra la cercanía y preocupación del Papa por ellos. La visita los fortalecerá y les dará un nuevo valor para permanecer en su tierra natal.
Sitios emblemáticos, cuna de nuestra fe, son parte de esta histórica visita, la primera de un Pontífice, aunque antes San Juan Pablo II y Benedicto XVI, lo intentaron. El lema de este viaje es “Todos son hermanos” y eso es lo más distintivo de sus encuentros marcados por la búsqueda de unidad y reconciliación. El Papa se reunirá en Nayaf, uno de los lugares más sagrados del islam chiíta, con el Gran Ayatolá Al-Sistani, y visitará Ur, Erbil, Mosul y Karakosh. Todas ciudades que sufrieron el terror de los yihadistas.
La Fundación Pontificia Ayuda a la Iglesia que Sufre (ACN) ha acompañado y apoyado a los cristianos perseguidos en Irak. En los últimos
cinco años, han financiado proyectos por más de 46,5 millones de euros
para mantener la presencia cristiana en ese país. Hoy, quieren acompañar al Santo Padre en este viaje, para seguir llevando esperanza a quienes tanto han sufrido.
Para más información: www.acn-chile.org