Francisco ha logrado poner en marcha un pequeño negocio de venta de jabón. A través de su campaña de Navidad, ACN se ha propuesto apoyar a otros desplazados de Pemba con diversos cursos, sobre actividades generadoras de ingresos, para que surjan nuevas oportunidades a través de la creación de cooperativas y pequeñas asociaciones entre la población local y los desplazados.
En Siria, diez años de guerra civil han dejado a la población traumatizada. Muchos han sufrido la crueldad de los grupos islamistas, que les han robado sus propiedades y posesiones. Los servicios de salud han colapsado y el miedo es omnipresente. Los ancianos, los discapacitados y los enfermos sufren los efectos de las sanciones internacionales.
“De aquí, de Siria, Palestina, Jordania y de lo que hoy es Israel, vinieron los primeros cristianos”, explica el P. Hugo Alaniz, misionero argentino que proporciona curación a los desplazados de Alepo.
“Creo que es una obligación para nosotros, como Iglesia, ayudar a los cristianos de Oriente Próximo, porque gracias a ellos conocemos el mensaje del Evangelio”.
Muchos sirios, como Majed y sus padres, se han refugiado en el Líbano, donde las parroquias locales les proporcionan atención pastoral, alojamiento y medicinas, gracias al apoyo de ACN. “Papá dice que de niño me convertí en un refugiado como el Niño Jesús”, dice Majed. “Cuando no tenemos nada que comer, vamos al lugar donde la Iglesia nos proporciona comida”.
El sufrimiento de los desplazados se manifiesta de muchas maneras: hay dolor, desorientación, pérdida de intimidad y de autoestima, rupturas de familias y de la comunidad de fe, cansancio, hambre y frío. Aquí, las manos amigas y la caridad activa de los colaboradores sobre el terreno de ACN suponen la diferencia entre la inanición y la supervivencia y entre la desesperación y la esperanza.
Gracias a los donativos recibidos durante la campaña de Navidad, los sacerdotes y religiosas podrán proporcionar a los desplazados y refugiados de muchos países una ayuda material y el consuelo de la fe. Incluso podrán entregar pequeños regalos de Navidad para llevar la alegría a los corazones de los niños.