40 años de la Biblia del Niño, con la bendición de los Papas
San Juan Pablo II estuvo presente cuando la “Biblia del Niño” fue presentada por primera vez en México, en 1979. El Papa Emérito Benedicto XVI, durante su visita a Brasil en 2007, recibió de la mano de un niño el ejemplar número 10 millones en portugués. Y el Papa Francisco solicitó, como Cardenal de Buenos Aires, miles de Biblias del Niño.
Al cabo de 40 años, ACN ha impreso 51.188.209 ejemplares en 191 idiomas y cada día recibimos nuevas solicitudes de todo el mundo.
A diario nos llegan cartas de gratitud. Para muchos niños de países necesitados la Biblia del Niño es el único libro que tienen. Desde Togo, Dieudonné, de 13 años, nos da las gracias así: “Todas las palabras de Jesús nos hacen reflexionar y dan sentido a nuestra vida”. Y de unos presos brasileros nos llegan líneas como éstas: “Estoy en prisión porque maté a un hombre. Tengo Sida. Sólo Dios sabe lo que pasa en mi interior. No sé qué hacer con mi vida, pero una cosa es segura: esta pequeña Biblia me ayudará”.
Nadie sabe qué fruto producirán las más de 51 millones de semillas en forma de “Biblia del Niño” y cuántos millones de almas serán convertidas por ella en las próximas décadas.
Hay una bendición sobre esta obra, desde que el fundador de ACN, el sacerdote holandés Werenfried van Straaten, la lanzara en el Año del Niño, en 1979, con las siguientes palabras: “Los niños necesitan algo así como una Biblia del Niño para que la imagen de Cristo cobre vida en ellos”.
La semilla ha germinado en el corazón de los niños y, gracias a la generosidad de ustedes, no deja de florecer.
Muchas veces la Iglesia local no tiene medios para proporcionar una Biblia infantil en el idioma materno, o está perseguida o discriminada y no le está permitido publicar esos escritos. Muchos niños son tan pobres que no pueden comprarse un libro. Por eso queremos regalarles una Biblia especial.
ACN presentó la Biblia del Niño en la Conferencia de los Obispos de Latinoamérica celebrada en la ciudad mexicana de Puebla a finales de enero de 1979, en la que también participó el Papa Juan Pablo II durante su primer viaje fuera de Italia. El éxito fue impresionante: los obispos encargaron directamente 1,2 millones de ejemplares en español. De esto se enteraron misioneros, obispos y catequistas de otros países, lo que hizo necesario traducirla a otros idiomas.
Hoy en día existen versiones en 189 lenguas: que van de la A de afar, el idioma que hablan aproximadamente medio millón de personas en zonas de Etiopía, Eritrea y Yibuti, hasta la Z de zulú, un idioma de los bantúes, en África meridional. Periódicamente se añaden nuevas traducciones pues sólo en África, por ejemplo, se hablan más de 2.000 idiomas. Allí, la Biblia del Niño presta una importante contribución a la alfabetización.
TAMBIÉN PUEDES HACER UNA TRANSFERENCIA A NOMBRE DE AYUDA A LA IGLESIA QUE SUFRE, RUT 73.537.400-1, CTA. CTE. 11175-9 DEL BANCO SANTANDER, E-MAIL: acn@acn-chile.org, ASUNTO: Biblia del Niño
Millones de personas en todo el mundo no tienen acceso a la Palabra de Dios. En muchos lugares donde las guerras han marcado de por vida a la población, la Iglesia es la que promueve la reconciliación. Y para ello, la lectura espiritual es un medio fundamental.
Movidos por este convencimiento, ACN comenzó el año 2005 con el taller “Mensajeros de la Palabra de Dios” para motivar en los niños de Santiago y regiones, su espíritu misionero. ¡SÚMATE CON TU COLEGIO! Conoce esta campaña.