Desde ACN se resalta la urgencia del apoyo a Siria: «El 90% de la gente vive por debajo del umbral de la pobreza, y ahora el terremoto ha resultado en más necesidad e incertidumbre. Apenas hay trabajo y el sueldo medio es de solo 30 euros. No hay agua ni luz, la gasolina es muy cara y escasa, por eso la Iglesia local nos sigue reclamando ayuda para bienes de primera necesidad».
Nueva ayuda de ACN para reconstruir casas
Las Iglesias de Siria siguen impulsando tenazmente proyectos de ayuda social y pastoral, para sostener a las familias más afectadas. Actualmente quiere apoyar la reparación de las viviendas afectadas por los devastadores terremotos del mes pasado. Para ello, cuenta con una nueva ayuda de Ayuda a la Iglesia Necesitada, que se ha comprometido a destinar más de 500.000 euros para que los cristianos puedan volver a sus viviendas, así como para el pago del alquiler de alojamientos temporales.
“La Iglesia es a menudo la única fuente de ayuda para los cristianos, que aseguran no estar recibiendo ayuda de la ONU ni de otras ONG internacionales”, reconoce Xavier Bisits, responsable de proyectos para Siria en ACN, recalca que esta ayuda es absolutamente vital dado las duras condiciones económicas impuestas por el embargo internacional, «De ahí que las Iglesias estén socorriendo a quienes no tienen dónde ir».
Según Bisits, “todavía hay al menos mil personas en refugios gestionados por la Iglesia y en salas parroquiales, pero ese número está disminuyendo, ya que o bien se están mudando a casas de familiares o bien los ingenieros han visitado sus viviendas y las han declarado seguras”.
Unidad de los cristianos en la caridad
La Comisión Mixta Ecuménica de Iglesias Cristianas de Latakia -formada por greco-ortodoxos, siro-ortodoxos, apostólicos armenios, presbiterianos y las Iglesias católicas- recibirá 250.000 dólares de ACN para restaurar más de 250 viviendas dañadas por la catástrofe natural. En la provincia de Latakia se derrumbaron más de cien edificios a raíz del seísmo del 6 de febrero, y se calcula que el número de edificios que sufrieron daños de algún tipo supera los 17.500.
En Alepo, donde las Iglesias también han abierto sus puertas a los que se han quedado sin hogar, existe un plan similar. Así, bajo la dirección del Consejo Episcopal de Alepo, se ha creado una comisión de ingenieros especializados encargada de evaluar los daños en las viviendas para ayudar a los supervivientes a regresar a ellas. Bisits se confiesa “impresionado por la forma en que las Iglesias están colaborando unas con otras para administrar bien los fondos”, añadiendo que la reparación de viviendas es un proyecto poco habitual para ACN, pero que las necesidades de la comunidad local la convierten en una necesidad apremiante.