Otros beneficiarios relatan favores espirituales del santo, como el P. Godino Phokoso, de la diócesis de Dedza, en Malawi; quien explica a la fundación cómo su padre le transmitió la devoción a San José:
“Solía llamar a san José “el Carpintero”. Me hablaba mucho de él. Me contaba que era un hombre justo, un hombre trabajador, un padre amoroso”. Fue también san José quien le ayudó, cuenta P. Godino, a ingresar al seminario y durante su preparación y sus estudios para convertirse en sacerdote. Su relación con el santo es “como la de un padre y un hijo”.
“Él es mi padre amoroso que nunca se cansa de mis peticiones”, como “realizar una buena predicación, ser un buen servidor de Dios, salud, etc. He recibido muchas de las cosas de las que ahora puedo dar testimonio, otras están en camino”, dice.
Entre los testimonios recogidos por ACN también han llegado historias de milagros y curaciones atribuidas a la intercesión del santo en la India. El sacerdote jesuita George Kerketta, de la parroquia de san José en Dolda, India, a quien ACN ha ayudado a reparar el techo de la iglesia, narra sobre crisis matrimoniales o familiares solventadas gracias a la intercesión del santo. El jesuita está seguro que las vocaciones sacerdotales y de religiosas han nacido de la intercesión del patriarca. Pero en la parroquia ubicada en la selva también relatan ayudas en momentos impactantes, como cuando uno de los fieles de la parroquia, que, fue atacado por un tigre y se recuperó de sus heridas después de que los miembros de su familia rezaran a san José.
La celebración del Año de San José ha estado marcada por la COVID-19, lo cual ha sido también para muchos una oportunidad para encomendarse a su protección, según relata el P. Ernest Adwok, párroco de la Catedral de San José en Malakal, en Sudán del Sur.
“El Papa Francisco quiere que este año esté dedicado a san José. Estamos en tiempos de bloqueo debido a la pandemia. A pesar de ello, ¿se pueden realizar algunas actividades con motivo del año de san José? Creo que si confiamos en Dios puede ocurrir cualquier cambio. Esperamos que, por la intercesión de san José, todo el mundo se libre de esta pandemia”, señala el sacerdote.
“San José fue un hombre de sueños y un hombre de acción. Sueños y acciones: lo he tomado como mi modo de vida, como mi vocación. Tengo sueños sobre mi vida futura. ¿Qué voy a hacer en la parroquia donde trabajo?” reflexiona el sacerdote.