Los adelantos del plan paso a paso han permitido ampliar los aforos de las Misas dando la oportunidad a los fieles a volver a vivir el encuentro con el Señor en la Eucaristía. Gracias Señor por esta gran noticia.
Gracias a ello voluntarias de Ayuda a la Iglesia que Sufren pudieron dar testimonio del trabajo realizado por la fundación que busca ayudar a los cristianos perseguidos y que sufren en distintos países del mundo.
Una labor que nos muestra la generosidad de sacerdotes, religiosas, catequistas y personas de buena voluntad que generosamente se brindan por curar heridas y devolver la esperanza. En pandemia han tenido que multiplicar sus labores, pero en todos ellos se ve la felicidad de quien se prodiga a los demás.
Llámanos e incribe tu parroquia para que los podamos visitar y contar de esta extraordinaria obra que vive gracias a la generosidad de todos.