Centroáfrica lidera la triste lista de los países más pobres del mundo. A eso, se le suma la violencia que los amenaza hace años, y se ha acentuado en este último tiempo. Este 2021 comenzó con la mayor parte del país tomada por grupos rebeldes.
Pese al peligro, la Iglesia se mantiene en ese país para atender y dar esperanza a la gente. Los sacerdotes y las religiosas de Centroáfrica trabajan para acoger a los refugiados, curar a los enfermos, alimentar a los hambrientos, educar a los niños y jóvenes y, sobre todo, dar el acompañamiento y el consuelo espiritual que tanto necesita la población.
Sabemos que para dar la atención que la gente necesita, ellos deben estar bien preparados. Es por eso que nos hemos comprometido a ayudar con la formación de 30 asistentes pastorales de la diócesis de Bangassou La formación anual de un miembro del equipo pastoral cuesta $185.000.
Con $15.500 financias la formación de un sacerdote o religiosa por un mes. ¿Cuántos meses de preparación les quieres regalar?